Sobre la propuesta: Laboratorio de co-creación / campo - ciudad

Cuando hablamos de Bogotá como ciudad-región nos referimos a la interdependencia con los municipios y departamentos cercanos con la capital del país. Bogotá, tiene una triple dimensión regional que incrementa su tamaño: 15 millones de habitantes y más del 30 % del PIB nacional. En primer lugar, constituye una verdadera ecorregión con los 27 municipios de las cuencas alta y media del río Bogotá, eje estructurante de Bogotá. Luego, tiene relaciones cercanas con los 114 municipios del departamento de Cundinamarca. Y, en tercer lugar, está conectada con los departamentos de Boyacá, Tolima y Meta (Castro, 2018).

Esta interdependencia implica un diálogo colaborativo y de ejercicios de construcción colectiva, se generen procesos de transformación, nuevas realidades y resultados extraordinarios que impacten significativamente la prosperidad y el mejoramiento en las condiciones de vida de la gente (CCB, 2015). En este contexto se hace fundamental generar espacios de intercambio no sólo entre regiones, sino además de prácticas interdisciplinares, de ahí que el encuentro entre la ciencia, la tecnología y el arte adquiera sentido, para propiciar impactos importantes en la calidad de vida de las personas.

El Laboratorio de co-creación campo ciudad es un espacio de experimentación, colaboración y aprendizaje, destinado resolver desafíos de diseño de tecnologías apropiadas para el campo, a través de encuentros de colaboración gestados desde la ciudad, y la puesta en marcha de un ejercicio de co-diseño con agricultores de la provincia de Sumapaz, específicamente de los municipios de Tibacuy y Fusagasugá.

Sobre los autores: Camilo Matiz, Diego Sánchez, José Puentes, Aura Mora, Anderson Cárdenas, Karen Navarrete. 

Somos un equipo de emprendedores sociales apasionados por la tecnología, el cambio social y el diseño de tecnologías apropiadas bajo ejercicios de co-creación y empoderamiento de comunidades locales. El Centro de Innovación Rural propone una plataforma de colaboración campo-ciudad. En los anexos se incluyen las hojas de vida del equipo facilitador.